Ubicada en una de las calles más comerciales de Berlín, Friedrichstrasse, Deutsche Bank inauguró su oficina prototipo, conocida como Q110, el banco del futuro, en 2005. El nombre responde a la abreviatura de Quartier 110, apelativo con el que se conoce el edificio que la acoge.
Pero es más que una sucursal. Y es que más allá de cajeros automáticos y ventanillas de atención al público, que también existen, en ella se propone dar un servicio completo a sus clientes, en un ambiente relajado. Dispone de cafetería, tienda de diseño, zona de juegos para niños…
Así la zona lounge, dispone una barra de bar atendida continuamente y sofás, mesas… Con capacidad para 30 personas.
En ella, los clientes pueden hablar de sus finanzas con un asesor mientras degustan un café. Además, es ‘pet friendly’. Esto es, se puede acceder con animales de compañía, como se puede ver en esta imagen:
Las últimas tecnologías están presentes en la oficina. Y es que la entidad ha insistido en la necesidad de incluir las tendencias más punteras en este aspecto. Según explican, hacen más transparente cualquier movimiento financiero.
En este sentido, existen salas de reuniones en las que se pueden llevar a cabo videoconferencias.
En la sucursal Q110 también hay espacio para las compras: Dispone de una tienda con productos de diseño en la que se puede dar una vuelta mientras, por ejemplo, se espera a ser atendido. Hay utensilios para el hogar, la oficina, los niños…
También se puede visitar la entidad con los más pequeños de la casa. Y es que tiene un rincón de juegos para ellos en el que pueden permanecer, como máximo, durante dos horas. Vigilados por personal cualificado, los niños pueden jugar, pintar, cantar… Mientras los padres y las madres revisan sus cuentas:
(Fotografías: Deutsche Bank)