Libertad financiera significa alcanzar un estado de solvencia económica a través del cual, sin tener que trabajar, podemos ser capaces de cubrir todas nuestras necesidades de dinero. También conocida con el nombre de independencia financiera, se trata de una corriente de pensamiento que surgió a principios de siglo en Estados Unidos.
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Libertad financiera: qué es
La libertad financiera, también conocida con en nombre de independencia financiera, es una corriente de pensamiento cuyo objetivo es conseguir un estado de tranquilidad económica a través de la cual una persona puede cubrir sus necesidades de dinero, mantener su nivel de vida, sin tener que trabajar.
El término de libertad económica, surge en Estados Unidos a principios de este siglo, lo acuñan Robert Kiyosaki y los precursores del movimiento FIRE, acrónimo de Financial Independence, Retire Early, que traducido al castellano significa independencia financiera, jubilación temprana.
En qué se basa la libertad financiera
Los principios de la libertad financiera se basan en el ahorro y la inversión. En mantener un estilo de vida austero, sin grandes lujos o caprichos, en el que todos los gastos están planificados.
Pero la libertad financiera no se consigue sólo llevando una vida ahorrativa. De forma paralela se tienen que llevar a cabo ciertas inversiones que nos ayuden a generar los ahorros suficientes que nos permitirán retirarnos cuanto antes del mercado laboral. Y evitar un endeudamiento excesivo.
Es decir, la libertad financiera no quiere decir que seamos o podamos vivir como millonarios, sino que podremos disfrutar de un estilo de vida cómodo sin tener que preocuparnos por el mundo laboral.
Qué pretende la libertad financiera
El principal objetivo de la libertad financiera es vivir sin trabajar, retirarse del mercado laboral sin tener que llegar para ello a la edad de jubilación.
En este sentido, la independencia financiera, como movimiento o forma de vida, que ganado mucha relevancia entre la denominada generación millenial ya que consideran contradictorio tener que jubilarse para empezar a disfrutar del tiempo libre o para poder hacer realidad sus aficiones. Entre los países con más libertad financiera están Australia, Suiza y Canadá.
Cómo se consigue la libertad financiera
Aunque no existe una fórmula concreta para conseguir la libertad financiera, sí hay un punto de partida. Así lo primero que debemos hacer para poder alcanzarla, es montar un plan: hacer números para saber cuánto dinero necesitamos para vivir y diseñar una estrategia de ahorro e inversión que no nos suponga un excesivo agobio personal y que nos permita conseguirlo.
Y en ella se tienen que combinar varios aspectos. Desde llevar un estilo de vida sencillo a invertir de forma inteligente los ahorros, que nos generen las rentas suficientes para poder dejar de trabajar lo antes posible. Por tanto, para conseguir la libertad financiera tenemos que establecer unas prioridades para controlar nuestros gastos e invertir y ahorrar nuestras ganancias.
Consejos para alcanzar la libertad financiera
No lo negaremos: conseguir la libertad financiera, por mucho plan que diseñemos, es muy complicado. Con todo, hay algunos puntos que nos pueden ayudar a trazar nuestra estrategia:
- Reduce tus pequeños gastos. Se trata de un paso fundamental cuando queremos ahorrar. Nos referimos a los gastos hormiga y a ciertos caprichos, quizás momentáneos. Si logramos reducirlos, abriremos el camino hacia el ahorro.
- Empieza a ahorrar. Cuanto antes lo hagas, antes podrás disponer de un colchón para empezar a plantearte seriamente la libertad financiera.
- Controla gastos e ingresos. Identifica en qué te gastas el dinero cada mes y cuánto puedes ahorrar.
- Estudia nuevas fuentes de ingreso y aprende a invertir con seguridad. Diversifica tus inversiones, adáptalas a tu perfil y aprende a gestionarlas para obtener el mayor beneficio. En este sentido, y como el sector financiero es muy complicado, es recomendable que, si no conoces bien la materia, consultes a expertos que te guíen durante el camino.
- Asume los riesgos necesarios (no más). Insistimos: si no conoces el sector financiero, rodéate de buenos expertos. Una cadena de malas inversiones podría llevar al traste no sólo nuestro objetivo de conseguir la libertad financiera, sino también nuestra economía.
- Planifica tu jubilación, por lo que pueda pasar en el futuro.
- En la medida de lo posible, evita deudas o amortiza anticipadamente tu hipoteca
Fases de la libertad financiera
Como hemos ido viendo, alcanzar la libertad financiera es un proceso que no es fácil y rápido. De hecho, conlleva un plazo de tiempo bastante importante. A través de él, se van pasando varias fases. Estas:
- Fase 1: la seguridad. Es el primer paso hacia la libertad financiera y se da cuando hemos conseguido el colchón necesario para poder hacer frente sin problemas a los posibles imprevistos que nos puedan surgir.
- Fase 2: la independencia. Tras conseguir la seguridad financiera, iniciamos una nueva etapa, en la cual los ingresos y los ahorros van creciendo. Con todo, y aunque vayamos a más, se tiene que seguir trabajando.
- Fase 3: la libertad financiera. Último paso. Se da en el momento en el que por fin hemos conseguido juntar el dinero suficiente para hacer frente a nuestras necesidasdes y posibles gastos extra que podamos tener.
Y, recuerda una vez más: conseguir la libertad financiera no es fácil ni rápido, además no quiere decir que nos convirtamos en millonarios. Sencillamente, nos ayuda a vivir de forma tranquila, sin tener que preocuparnos por trabajar ni sufrir el estrés que puede conllevar.