Las hipotecas para empresas son una opción cuando se necesita dinero para emprender o cuando se quiere ampliar un negocio. Descubre todo lo que se necesita para conseguir este tipo de financiación.
¿Qué es una hipoteca para empresa?
Una hipoteca para empresas es un tipo de financiación, un préstamo hipotecario, que se solicita para poner en marcha, impulsar o ampliar un negocio o actividad comercial.
Las hipotecas para empresas, como sucede con las hipotecas para particulares, suelen tener como finalidad adquirir un bien inmueble en el que se pueda realizar una actividad empresarial.
Así, habitualmente se solicita una hipoteca para negocios para comprar instalaciones: un local comercial, una nave, oficinas…
Hipotecas para empresas: requisitos
Para que un banco empiece a estudiar nuestra solicitud de hipoteca para empresas, se tienen que cumplir con ciertos requisitos. Se trata de unos mínimos con los que se asegura que tenemos la solvencia y garantías necesarias para poder hacer frente a las cuotas y, en caso de impago, poder responder de alguna manera.
Los requisitos en las hipotecas para negocios pueden variar en función de la entidad en la que se pida la hipoteca, aunque estos son los más habituales:
- Que la empresa o sus administradores dispongan de una propiedad sin cargas o con muy poca hipoteca por amortizar.
- No tener deudas pendientes ni impagos.
- Demostrar solvencia, no estar en pérdidas.
- Estar al día en el pago de impuestos, Hacienda, cuotas de la Seguridad Social…
- En el caso de tratarse de un nuevo negocio, explicar muy bien el proyecto.
- Contar con un mínimo de ahorros (habitualmente, alrededor del 30 % del importe que se va a solicitar en la hipoteca para empresas).
Ten en cuenta que este es, como hemos dicho, un listado orientativo y que los requisitos y las exigencias de las entidades varían. Por tanto, es tan posible que en un banco te exijan estos requisitos y en otro, otros diferentes, como que, aun cumpliéndolos, te denieguen la financiación.
Documentación en una hipoteca para empresas
Al hilo del apartado anterior, la documentación que tendrás que presentar al pedir una hipoteca para negocios variará en función de la entidad y tu perfil. Por ejemplo, si la solicitas en uno de los bancos con los que trabajas habitualmente, es posible que te exijan menos papeleo, básicamente porque ya conocen tus movimientos financieros.
Sea como sea, estos son los documentos más habituales en las hipotecas para negocios:
- Documentación de la Seguridad Social en la que se certifique la situación de las deudas.
- Declaración del impuesto de sociedades.
- Certificados tributarios.
- Balances de cuentas.
- Certificados de deudas
- Tasación y notas de la propiedad del inmueble que se hipotecará.
Como puedes ver, el objetivo de estos documentos es corroborar cuál es la situación (en cuanto a números se refiere) de tu empresa.
Características de las hipotecas para empresas
Las hipotecas para empresas tienen muchas diferencias respecto a las hipotecas para particulares, tanto en tipos de interés, como en plazos de amortización como en porcentajes de financiación
Al tratarse de negocios –donde el riesgo de impago puede ser mayor que el de una vivienda habitual– este tipo de préstamos hipotecarios suelen presentar condiciones de financiación menos ventajosas. En general:
- El porcentaje de financiación apenas alcanza el 60 % o 70 % del valor de tasación del bien a adquirir (en una hipoteca para vivienda, financia hasta el 80 %, a veces más).
- Los tipos de interés pueden ser fijos o variables, pero más elevados que una hipoteca convencional.
- Los plazos de amortización son más cortos, entre 10 y 15 años, cuando lo habitual es que se alarguen hasta 30.
- Las hipotecas para empresas suelen tener periodos de carencia, un tiempo en el que se pueden pagar solo intereses o se puede aplazar totalmente el pago de las cuotas.
- Pueden ofrecer sistemas de amortización diferentes al francés, habitual en España y en el que a medida que van evolucionando los pagos se abonan menos intereses y se amortiza más deuda.
Pedir una hipoteca para empresas paso a paso
El procedimiento para solicitar una hipoteca para negocios no es muy diferente al de pedir una hipoteca para un uso particular. Te mostramos aquí el paso a paso:
- Haz números: determina lo más ajustado posible el importe que necesitas pedir en tu hipoteca para negocios.
- Compara hipotecas para negocios: mira en diferentes bancos y financieras qué condiciones te ofrecen y si estas satisfacen tu necesidad. Tienes dos opciones: mirar entidad por entidad o usar un comparador de hipotecas, como el de CrediMarket, donde podrás analizar en minutos la oferta de los principales bancos de España. Además, contarás con la ayuda gratis y sin compromiso de nuestros expertos.
- Elige la opción que más te interese, presenta tu solicitud y adjunta toda la documentación que te pidan.
- Espera a que el banco haga el estudio de viabilidad de la operación.
- Si tu hipoteca para negocios sale concedida, lee atentamente toda la documentación que te entregue la entidad y, si estás de acuerdo con todos los puntos, proceder a la firma.
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