En la actualidad, en España hay más de 8,5 millones de jubilados. La banca, consciente del protagonismo de este colectivo, diseña productos destinados específicamente a ellos.
Cuentas pensión, préstamos e incluso tarjetas para jubilados son algunos de los productos bancarios destinados a los pensionistas.
Cuentas pensión
Las cuentas pensión, al igual que ocurre con las cuentas nómina, están diseñadas específicamente para que los jubilados domicilien su pensión y al hacerlo, puedan disfrutar de determinadas ventajas. Se trata, eso sí, de cuentas bancarias cuya operativa es igual a la que ofrecen las cuentas corrientes tradicionales aunque cuentan con determinadas ventajas:
– Ausencia de comisiones
– Abono de la pensión el día 25 de cada mes
– Transferencias gratuitas
– Descuentos y promociones
– Regalos al abrir la cuenta
Por lo general y para disfrutar de estas ventajas el banco exigirá al titular de la cuenta que domicilie una pensión con un importe mínimo (suele ser de unos 600 euros), que domicilie recibos e incluso que realice gastos con la tarjeta de crédito.
La oferta de cuentas pensión es muy amplia. A continuación les mostramos algunas de las más importantes:
- Cuenta Pensión Club Ahora de «la Caixa»: no tiene comisiones de mantenimiento ni de administración. Ofrece dos tarjetas de crédito gratuitas y el ingreso de cheques ilimitado. Permite 24 transferencias estándar o el ingreso de cheques por autoservicio. El titular de la cuenta debe domiciliar una pensión de al menos 600 euros, realizar tres compras al trimestre con la tarjeta o domiciliar tres recibos básicos. Además, deberá ser tomador de un seguro de vida, hogar o vehículo o beneficiario de un seguro de salud, tener un saldo mínimo de 10.000 euros en un fondo de inversión o un plan de pensiones individual en una renta vitalicia.
- Cuenta Senior de Bankia: se ofrece sin comisiones a quienes domicilien una pensión de al menos 200 euros. Además, por domiciliar la pensión, el titular recibirá un set de jarra y vasos de cristal.
- Cuenta Senior de Popular: se presenta también sin comisiones y adelanta la pensión el día 25 de cada mes. El cliente debe domiciliar una pensión mínima de 300 euros y cumplir una de las siguientes condiciones: domiciliar tres recibos básicos, realizar 12 compras al trimestre con la tarjeta de crédito o con la tarjeta de débito, mantener 30.000 euros en productos de ahorro, un plan de pensiones con aportaciones periódicas de 50 euros al mes o 600 euros en los últimos 12 meses, ser titular de 1.000 acciones de Popular o que la suma de las primas de los seguros de Auto, Hogar, Vida o Salud sea a 300 euros.
Cuentas pensión con remuneración o regalo
Las cuentas en las que se domicilia la pensión también pueden ofrecer remuneraciones. Se trata, eso sí, de cuentas nómina que contemplan la posibilidad de vincular este tipo de ingresos.
Así, por ejemplo, la Cuenta Nómina/Pensión de Bankinter ofrece una remuneración del 5,00% TAE durante 12 meses y del 2,00% TAE durante el segundo año. Consta de un seguro de accidentes gratuito y un anticipo de pensión. Para obtener estas condiciones se ha de domiciliar una pensión de mínimo 1.000 euros al mes y al menos durante dos años, debiéndose ingresar antes de pasados dos meses de la contratación de la cuenta. El saldo máximo remunerado no excederá los 5.000 euros.
Préstamos para jubilados
Aunque la oferta de préstamos para jubilados no es tan amplia como la de cuentas pensión, sí es posible encontrar en el mercado préstamos destinados específicamente a este colectivo.
A la hora de conceder un préstamo y determinar el tipo de interés, la entidad valorará minuciosamente no sólo el perfil del solicitante y su situación crediticia sino, fundamentalmente, la edad de quien solicita el préstamo. Y es que, la edad es una de las variables más importantes en estos casos.
Entre los préstamos para jubilados, destaca el Préstamo Estrella Club Ahora de «la Caixa», que a un plazo de amortización de hasta cuatro años permite financiar desde reformas en la vivienda, adquisición de aparatos de asistencia o acceso a determinados servicios para el bienestar del titular del préstamo.
Los jubilados también pueden conseguir financiación a través de las hipotecas inversas. Préstamos mediante los cuales el pensionista convierte en valor de su casa en una renta mensual.