Justo hace un año, en septiembre de 2014, Mikel García-Prieto era nombrado director general de Triodos Bank en España. Ingeniero de formación, recaló en la entidad de banca ética desde sus orígenes aquí.
Coincidiendo con su primer aniversario al frente de Triodos Bank, Credimarket le entrevista para hacer balance de estos 365 días y hablar de proyectos de futuro. Entre ellos, sus objetivos de cara al cierre de este 2015 y cómo se presenta 2016.
Así, nos adelanta que está previsto que la entidad invierta más en tecnología, diversifique su cartera de crédito, abran nuevas oficinas…
Este septiembre se cumple un año de su nombramiento como director general de Triodos Bank. ¿Qué balance hace de estos 12 meses? ¿En qué ha cambiado la entidad?
Estamos en un momento de profundo cambio social y económico, que tiene una relevancia especial en la industria financiera. En apenas unos años han desaparecido entidades financieras de toda la vida y nos encontramos en un sector en constante cambio, con nuevos competidores por el lado de la tecnología y altamente regulado.
Creo que en Triodos Bank España hemos gestionado con éxito la transición entre los diversos cambios producidos en el mercado financiero, el mapa regulatorio y la estructura organizativa. A pesar de los esfuerzos dedicados a atender los diferentes desafíos, hemos crecido un 10% de balance en el primer semestre de 2015 y superado los 190.000 clientes.
Pero, sobre todo, hemos estado muy cerca de esas empresas con valores que necesitan un socio financiero estable y con enfoque sostenible a largo plazo, que les comprenda y acompañe. En este sentido, solo en el primer semestre de 2015 hemos aumentado en un 28% el número de nuevos préstamos dentro de los sectores social, cultural y medioambiental.
En este año, además, nos hemos centrado en crear una comunidad de valores entre nuestros clientes, empleados y otros grupos de interés. Hacia ello se dirigen acciones como el Premio Triodos Empresas, las actividades internas con clientes o los encuentros con valores entre ahorradores y proyectos financiados. En este año y los próximos este será un eje central de nuestra actividad, ser algo más que un banco para nuestros clientes.
Recientemente han presentado los resultados de Triodos Bank correspondientes al primer semestre de 2015 y han aumentado en clientes, créditos concedidos, depósitos… ¿Se han puesto algún techo para finalizar el año?
Efectivamente los resultados de Triodos Bank durante el primer semestre de 2015 han sido satisfactorios. Para nosotros son un fiel reflejo de que la propuesta de Triodos Bank es sólida y sostenible en el tiempo.
En este sentido nuestro objetivo es cerrar 2015 con más de 200.000 clientes en España y una cartera de crédito diversificada, con un crecimiento superior al 30% en el número de nuevos préstamos. Prevemos crecer un 15% de balance y abrir alguna nueva oficina antes de que finalice el año.
¿Qué planes tienen para el próximo 2016? ¿Presentarán nuevos productos? ¿Cuáles?
En esencia, en Triodos Bank vamos a continuar haciendo lo mismo que cuando nacimos hace 35 años, y que se refleja en nuestra misión: promover un cambio positivo de la sociedad desde el sistema financiero y concienciar sobre un uso más responsable del dinero.
Esto, a través de nuestra actividad financiera, poniendo en relación a personas que nos dejan sus ahorros con empresas de la economía real que necesitan un préstamo para su actividad sostenible.
Sin embargo, estamos inmersos en un mundo que cambia y vemos cómo surgen nuevas oportunidades sociales y económicas, como la economía circular, el ‘crowdfunding’… Nuestro objetivo es trabajar al servicio de esta emergente renovación y desarrollar en la organización una cultura financiera basada en valores.
También queremos mejorar el servicio que ofrecemos como banco, lo que supone invertir en tecnología para ponerla al servicio de las personas. En 2016 seguiremos trabajando para diversificar nuestra cartera de crédito, abrir nuevas oficinas, ofrecer un servicio de atención al cliente omnicanal y de calidad, incluida la banca móvil, y ampliar productos y servicios para ser el primer banco de nuestros clientes.
Esto incluye los préstamos personales para necesidades vinculadas con nuestros sectores o los planes de pensiones, entre otros.
Pero lo más importante es aquello que vamos a hacer más allá de ser un banco, fomentando con nuestros clientes una relación más profunda, no sólo puramente transaccional y financiera, a través de diversas iniciativas de encuentro como las que comentaba antes.
A día de hoy, la Hipoteca Triodos, conocida popularmente como ‘ecohipoteca’, tiene uno de los diferenciales más competitivos del mercado (euríbor + 1,20 %). ¿Podría rebajarse aún más dados los últimos movimientos en intereses de los préstamos hipotecarios de otras entidades?
Intentamos ofrecer precios acordes a la oferta que hay en el mercado, aunque nuestro objetivo no es entrar en una guerra de precios, sino que la Hipoteca Triodos resulte favorable para aquellas viviendas sostenibles que incorporan altos criterios de eficiencia energética, como A+, A y B. Pueden ser viviendas propias o de autopromoción, como es el caso de Arroyo Bodonal, una cooperativa de 80 viviendas en Madrid.
No obstante, como no todo el mundo puede optar a una vivienda de estas características, ofrecemos un interés competitivo para el resto de viviendas con la opción, además, de que si un cliente acomete reformas para reducir el consumo energético en su vivienda, nos comprometemos a bajar el diferencial y adecuarlo a la nueva calificación energética obtenida tras las mejoras.
Esto supone una reducción de las emisiones de CO2 y un ahorro económico tanto en la hipoteca como en el pago por el uso de la energía en el hogar.
¿Ha cambiado el tipo de cliente de la banca ética en los últimos tiempos, a raíz de la crisis económica y financiera?
Igual que el movimiento de la responsabilidad social y la sostenibilidad es cada día más universal, nuestros clientes son cada día de perfiles más diversos. Eso sí, tienen en común que se plantean otra forma de operar con su banco y de utilizar su dinero.
Si bien al principio, cuando éramos menos conocidos, nuestros clientes provenían de ámbitos más vinculados con la ecología o el sector social, en los últimos años más personas han encontrado sentido a operar, ahorrar y financiarse con un banco que solo invierte en proyectos de la economía real que benefician a las personas y el medio ambiente, y que además cuenta lo que hace con su dinero.
El ser más visibles, contar con más oficinas y disponer de una oferta bancaria más completa ha hecho que el perfil de nuestros clientes sea más diverso y amplio. A ello se une la crisis de los últimos años, que ha hecho que más gente se haga preguntas sobre qué pasa con su dinero mientras lo tiene en el banco y busque alternativas. Esto ha hecho que más personas opten por una banca con valores, transparente y sostenible como la de Triodos Bank.
¿Cómo es el cliente de Triodos?
No contamos con un estándar de cliente. En general, son personas que reflexionan sobre sus decisiones de consumo, tienen sensibilidad y compromiso social, y buscan coherencia entre lo que piensan y cómo viven. Una curiosidad en Triodos Bank es que, al contrario que en la banca tradicional, son los hijos los que a menudo traen a sus padres para operar con nosotros.
En el plano de la financiación, la mayoría de nuestros clientes son pequeñas y medianas empresas sostenibles, que con su actividad promueven una economía real y humana. Pero también financiamos empresas y organizaciones de gran tamaño, siempre que operen dentro de los ámbitos social, cultural y medioambiental.
¿Cómo recala un ingeniero industrial como usted en la banca y concretamente en la banca ética, minoritaria?
Al final, como todo en la vida, la explicación está en las relaciones que estableces con otras personas. Un amigó me presentó hace años a un grupo de personas que estaba intentando crear un banco ético en España. La idea me pareció tan oportuna, tan sencilla pero tan revolucionaria a la vez y tan efectiva, por la capacidad de intervención en el mundo que tiene la banca, que me puse a completa disposición del proyecto. Y hasta hoy.