El riesgo de tipo cambio
Un depósito en divisas es aquel en el cual la imposición que se efectúa se hace con cualquier otra moneda que no sea la propia (con dólares, libras, etc).
Este tipo de depósitos tienen un riesgo que no presentan las imposiciones a tipo fijo (IPF) en euros, el riesgo de tipo de cambio. Dependiendo de como evolucione la divisa respecto al euro en el periodo de la IPF, podemos ganar o perder cuando cambiemos a euros. Eso independientemente del tipo de interés que nos ofrece el depósito en divisas.
Las IPF son un producto eminentemente conservador; nos aseguramos una rentabilidad moderada a cambio de tener asegurado el capital. Si uno se plantea un depósito en divisas, se rompe este binomio rentabilidad-seguridad si se cambian euros a divisa para constituir el depósito y al finalizar el plazo se revierte una vez más a euros (asumimos un riesgo de tipo de cambio muy alto con una rentabilidad muy baja).
En principio, este producto tiene sentido para personas que cobran una renta en divisas, mantienen en España una cuenta en esta moneda y, simplemente, tratan de sacar rentabilidad a su dinero (por ejemplo un jubilado americano que reside en España, y cobra su pensión en dólares). No tiene mucho sentido para las rentas obtenidas en euros.
La tributación de los intereses en el IRPF es idéntica en los depósitos en euros y en divisas: los primeros 6.000 euros de intereses tienen una retención del 19% y el resto del 21%.
Caso práctico
Supongamos que tenemos 2.000 euros que queremos invertir en el Depósito en Dólares USA a 1 año, que ofrece un 0,5% TAE.
Los 2.000 euros que invertimos equivalen a 2.650 dolares, puesto que el tipo de cambio euro/dolar a día de hoy es del 1,325.
Pasado el año los 2.650 $ iniciales nos dan un interés bruto de 13,25 $.
Con los 2.663,25 dolares que obtenemos al finalizar el año pueden ocurrir 3 situaciones según el tipo de cambio:
- Si se mantiene el tipo de cambio nuestro capital bruto total será de 2.010,75 euros.
- Si incrementa el tipo de cambio a 1,6 el habrá una pérdida porque obtendremos un capital bruto de 1.664, 53 euros.
- Si se reduce el tipo de cambio a 1,1 el capital total bruto obtenido será de 2.396,925 euros.
Obtendríamos un beneficio realmente elevado en el caso que el dolar perdiese valor. Si el dólar se mantiene nuestra rentabilidad es un exiguo 0,5% TAE y, si se aprecia la divisa respecto al euro, perderíamos dinero con el cambio.
Conclusiones
Los tipos de interés en este tipo de depósitos son muy bajos en relación a los depósitos en euros, lo que nos puede dar una idea del interés comercial que tiene la banca en este tipo de producto.
Obtendríamos un beneficio considerable siempre que el tipo de cambio se redujera, es decir, que la moneda extranjera pierda valor frente al euro; al cambiar la divisa a euros obtendremos más euros que los invertidos gracias al incremento de la TAE y a la reducción del tipo de cambio.
Entendemos que no es un producto para utilizar de forma especulativa, ya que si lo que queremos es invertir en divisas, hay otras formas mejores de hacerlo, vía ETF, inversión en Forex, etc, etc.
Imagen| ganessas