La reforma financiera ha cambiado drásticamente el mapa bancario español, que ha pasado de las 50 entidades que existían en 2009 a tan sólo 11 como consecuencia de fusiones, absorciones o SIP (fusiones frías).
Miles de clientes han visto cómo en tan sólo unos meses han desaparecido las entidades en las que tenían abiertas sus cuentas o contratadas sus hipotecas. Pero, ¿cómo ha afectado esta revolución financiera a los consumidores? ¿Cuáles han sido los principales cambios a los que han tenido que enfrentarse?
Los clientes bancarios han tenido que hacer frente estos últimos meses a cambios más o menos importantes en virtud de si su entidad ha vivido una absorción (por ejemplo Banesto por Santander) o una fusión (en el caso de la CAM y Banco Guipuzcoano con Banco Sabadell).
A todos los clientes de las entidades protagonistas de este tipo de operaciones se les ha comunicado por correo cuál será su nueva situación. Aquellos que operen con entidades que han sido fusionadas notarán cambios más importantes que los que trabajan con bancos o cajas absorbidos por un tercero.
Cambios tras la fusión de entidades
Entre los principales cambios a los que han tenido que hacer frente los clientes de entidades objeto de una fusión figuran los siguientes:
- Número de cuenta bancaria: Ha cambiado la numeración de su cuenta. No obstante, y para evitar trastornos, las domiciliaciones anteriores se han asentado en la nueva cuenta sin que se haya tenido que hacer nada.
- Libretas de ahorro: También se ha modificado la numeración. Se da el caso que los clientes de Banco de Valencia (ahora ya de Caixabank) no pueden operar ni en ventanilla ni en cajeros de La Caixa con su antigua libreta. Otras entidades, como Banco Sabadell, dan opción a sus clientes de que las usen hasta que se agoten.
- Tarjetas de crédito y débito: Son válidas tanto en comercios como en cajeros hasta que se produzca la integración operativa, y en algunos casos hasta que caduquen. En ambas circunstancias, se podrá sacar dinero a débito de los cajeros pertenecientes a sus nuevas marcas comerciales sin comisiones.
- Banca a distancia: Es otro de los cambios a los que se tendrá que hacer frente. Y en muchos casos se deberá disponer de una nueva tarjeta con las claves para acceder a la banca online. Es el caso de Banco Sabadell y su banca a distancia, BSOnline.
- Hipotecas y préstamos: No habrá cambios. Cualquier deuda contraída con una entidad que desaparece ni cambia ni se anula, simplemente se traspasa. Las hipotecas o préstamos contratados con las entidades que ya no existen no sufren ningún cambio.
- Otros productos: Como norma general se mantienen las mismas condiciones con las que se contrataron cuentas nómina, cuentas de ahorro, depósitos…
No obstante, desde las asociaciones de consumidores y desde las asociaciones de usuarios de banca recomiendan consultar con su nueva entidad si alguno de esos productos va a sufrir algún tipo de modificación. En este punto es importante fijarse en las comisiones que le puede aplicar su nueva entidad financiera.
