Las tarjetas de crédito con transferencia de saldo (también denominadas tarjetas con transferencia de línea de crédito), permiten transferir la deuda de una tarjeta de crédito a otra con un tipo de interés anual menor.
Se trata de un servicio que ya funciona desde hace diez años en países anglosajones (conocido como ‘Balance Transfer’), por el que el cliente podrá cancelar o amortizar la deuda que tenga en otra tarjeta y ahorrar dinero al mismo tiempo.
Actualmente, en España, solamente Barclaycard ofrece este servicio. En este artículo respondemos a las principales dudas de esta operativa novedosa, cómo funcionan, qué ventajas tienen o en qué se diferencian con respecto a las tarjetas de crédito convencionales.
¿Cómo funciona una tarjeta con transferencia de saldo?
Como avanzábamos, las tarjetas con transferencia de saldo permiten transferir la deuda de una tarjeta de crédito a otra.
Aunque en España esta figura financiera es menos habitual, la transferencia de saldos entre tarjetas de crédito es una práctica muy implantada en países como Estados Unidos, México o Reino Unido, donde incluso se ha llegado a limitar el número de tarjetas por cliente, hasta un máximo de ocho, por el peligro de sobreendeudamiento que pueden llegar a producir. Así, en España, Barclaycard ofrece este servicio para una tarjeta.
A través de las tarjetas ‘balance transfer’, el usuario puede transferir la deuda de una tarjeta a otra que goza, además, de un interés inferior. La mayoría de las tarjetas ‘balance transfer’ ofrecen un tipo inicial (APR) del 0%, aunque durante un tiempo limitado.
En el caso de Barclaycard, la entidad permite que la deuda que se tiene en una tarjeta de crédito de otra entidad se pueda financiar al 0% de tipo de interés nominal durante los 12 primeros meses.
Por su parte, Citibank dispone en Estados Unidos de la tarjeta City Simplicity Card, que ofrece una APR promocional del 0% durante 21 meses. Y Santander UK tiene una tarjeta con transferencia de saldos que ofrece también una APR promocional del 0% durante 15 meses.
¿Cómo se pueden pedir?
Para acceder al nuevo servicio de la tarjeta Barclaycard, que no añade ninguna cuota anual ni precisa cambiar de banco, el nuevo titular podrá indicar que desea activar el servicio.
La entidad estudiará la solicitud y, de salir aprobada, depositará el importe a la cuenta asociada a la tarjeta. Será el cliente el que cancele o amortice la deuda que haya contraído con otra entidad.
¿Cuál es el límite de crédito?
El límite de crédito que la entidad sufraga suele estar limitado. Así, por ejemplo, la tarjeta Barclaycard Oro dispone de una línea de crédito de hasta 7.000 euros.
Además del importe concedido para sufragar la deuda con la otra entidad, el cliente también dispondrá de una cantidad adicional como parte de su línea de crédito habitual, «al menos el 5% de la cantidad solicitada con el servicio con un mínimo de 250 euros», según concretan desde Barclaycard.
Por otro lado, el ahorro que el servicio transferencia de línea de crédito supone para el cliente depende de cada caso concreto; pero a modo de ejemplo, por 1.000 euros de línea de crédito transferida, el cliente se ahorraría alrededor de 150 euros, en el caso de la tarjeta de Barclaycard.
¿Qué gastos conllevan las ‘Balance Transfer’?
Usadas correctamente, estas tarjetas permiten al cliente ahorrar dinero, siempre y cuando, el cliente realice un control exhaustivo de los gastos y pague a tiempo su deuda.
Aunque la APR promocional sea del 0%, la transferencia de saldos no es gratuita. El cliente deberá pagar una comisión por servicio de transferencia de línea de crédito. Puede oscilar entre un 2 y un 5% del saldo transferido.
En caso de impago de la deuda, el interés inicial dejará de tener vigencia y se comenzará a aplicar el tipo de interés reflejado en el contrato de la tarjeta.
