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La implantación de las nuevas tecnologías ha ampliado su uso y los cajeros automáticos son más que fundamentales a la hora de realizar ciertas gestiones. Y es que más allá de para sacar dinero, han añadido funciones y permiten realizar operaciones que hace poco tiempo sólo se podían gestionar en persona.
Funciones de un cajero automático
Los cajeros automáticos no sirven solo para retirar dinero en efectivo, sino que ofrece un número de prestaciones mucho más amplia. De esta forma, en un cajero automático se puede:
- Sacar dinero en efectivo.
- Ingresar dinero en efectivo o en cheque.
- Consultar movimientos y saldos.
- Ordenar transferencias y traspasos (incluso destinadas a cuentas en el extranjero).
- Pagar recibos no domiciliados (la factura de la luz, por ejemplo) o impuestos municipales.
- Solicitar claves de acceso.
- Cambiar el PIN de la tarjeta.
- Suscribir y reembolsar de fondos de inversión.
- Pagar multas.
- Confirmar el borrador del IRPF.
- Reservar habitaciones de hoteles.
- Adquirir billetes de autobús.
- Recarga de tarjetas prepago y de tarjetas de móviles.
- Pedir talonario de cheques.
- Comprar entradas de espectáculos.
Puedes utilizar un cajero automático con una tarjeta de débito o de crédito, prepago, algunas de fidelización, etcétera.
Cajero automático: cómo funcionan las comisiones
Los cajeros automáticos pueden aplicar comisiones en función de la operación que se lleve a cabo a través de él.
En cualquier caso, los bancos están obligados a informar desde el propio cajero automático, y antes de que el usuario la lleve a cabo, acerca del coste que aplica a la gestión en concreto que se vaya a realizar. Así, antes de concretar la acción, el cliente sabe qué coste tiene y puede decidir si continúa o no con ella.
Aunque cada entidad tiene su propia política al respecto de las comisiones, por norma general, no las cobran en la mayoría de operaciones que lleves a cabo siempre que la tarjeta que utilices pertenece a su red.
Y decimos mayoría. Porque hay una gestión por la que siempre te añadirán un coste: sacar dinero a crédito. Eso sí, posiblemente, la comisión será más baja si lo haces en un cajero automático de la entidad de la que eres cliente.
Igualmente, existen acuerdos entre varias entidades para no cobrarse entre ellas por el uso de sus cajeros automáticos.
Evolución de las funciones de los cajeros automáticos
Fue en el año 1974 cuando el primer cajero automático se estableció en España gracias a una sucursal de Banco Popular de Toledo. A partir de ese año, cuando también aparecieron los cajeros automáticos conectados a una red, el sistema de extraer dinero a través de una tarjeta de crédito se estableció en toda la península.
La tecnología de estos ha variado mucho desde sus inicios y cada vez ofrecen más servicios y una mayor accesibilidad. Desde el primer cajero, en el que solo se podía extraer dinero, hasta los últimos, que cada vez ofrecen una mayor variedad de posibilidades.
A qué hora funcionan los cajeros automáticos
Salvo excepciones, los cajeros automáticos funcionan las 24 horas del día los 7 días de la semana. Y los podemos encontrar no sólo en las entidades bancarias, sino también en centros de trabajo, centros comerciales, aeropuertos, etc.
